Macedonia de nubes y claros

Por fin, tengo una horilla, sin robársela a Morfeo.
Solamente, se la he pedido prestada por un momento
al hígado hambriento, me he dicho :que espereeeee
Chute de dopamina, serotonina y marchando una de....
 NO APETITO. (Todo esto después de calentar una sopa
que ahora ya  ha tomado la forma del hormigón armado)
En fin...que me lío.
He regresado.
Hiperventilando una casa semiabondonada
 por la mierda de horario laboral
y aireando, de paso, las brumas (como dice Vane)
que un viaje completito arrastran...
Volvimos al corazón de España
sin haber dormido na de ná,
desorientados por el complejo de esponja
que nos embarga:
hallllla!!! o has visto eso, mira, mira
no te pierdas esto y aquello y lo de más allá
(y aún así, mucho se nos escapa).
Y las horas pierden su forma, se dilantan
como los relojes de la Persistencia de la memoria.
Explicaciones, recuerdos, conexiones...
Mi cerebro se convierte
en una perola
de frutas.
Siento que el almíbar ralentiza mis ganas de hablar.
Estoy saboreando el azúcar!
Muchas imágenes quedan plasmadas,
algunas se refugian  aún en la retina
y otras se perdeiron antes de llegar al andén número 20.

Y hoy el día esta despejado, vuelvo a pilates,
rozaré las manitas de mi sobrina Carmen
y hasta me dará tiempo a ducharme (jijiji).
Mañana, ya veremos
ya saben que esto es : Nubosidad Variable.

Por cierto,
la energia circundante mueve hasta las piedras mas colosales.
Deseen con fuerza todo lo que quieran
pero con cuidado.(Una primitiva no, por dios)
Librito de la semana:

Argentina : años de alambradas culturales,

de Julio Cortázar.