Pasen y vean,
Amelie ha vuelto
y esta vez no bromeo.
Efecto mariposa
Por fin.
Desencadenando
lo enredado
en una habitación propia.
Quiero ser como un milano.
Amelié tiene un ángel o dos o más
Lo digo con conocimiento de causa.
Sucede que tuvo una crisis, pero no una cualquiera de esas mensuales,
sino una de esas que ni metiendo la mano entre lentejas
ni contando orgasmos propios y ajenos,
me refiero a una crisis monumental que ni con alcohol de quemar se va.
Y el mismo día que tocó fondo
se levantó con los ojos hinchados,
desayunó con las chicas, y TACHAAAAAN:
recibió la llamada del millón,
y una voz amiga le dijo: ahora o ahora.
A lo que la pequeña Amelié respondió : !! YA !!
Dicho y hecho, maleta en mano otra vez,
caminito de espejos nuevos.
Y alehop :
Sucede que tuvo una crisis, pero no una cualquiera de esas mensuales,
sino una de esas que ni metiendo la mano entre lentejas
ni contando orgasmos propios y ajenos,
me refiero a una crisis monumental que ni con alcohol de quemar se va.
Y el mismo día que tocó fondo
se levantó con los ojos hinchados,
desayunó con las chicas, y TACHAAAAAN:
recibió la llamada del millón,
y una voz amiga le dijo: ahora o ahora.
A lo que la pequeña Amelié respondió : !! YA !!
Dicho y hecho, maleta en mano otra vez,
caminito de espejos nuevos.
Y alehop :
Amelié convertida en "cariátide" de un museo.
Circunstancias Hormonambientales
Hay una niña
sentada en la repisa
que no es nada científica.
Mastica chicle
mientra respira hondo,
aunque a veces se le olvida.
Respirar, te digo.
Mira la luna,
que esta noche
parece de mentira,
está ahí como pegada
sobre un fondo irreal
como si de carton piedra
se tratara.
Hay una niña
que no sabe cómo recauchutar un tarro de mermelada
que no sabe cómo parir un hijo
con más de un feto muerto en las entrañas.
Hay una niña que no sabe cómo
pero odia el wasap.
sentada en la repisa
que no es nada científica.
Mastica chicle
mientra respira hondo,
aunque a veces se le olvida.
Respirar, te digo.
Mira la luna,
que esta noche
parece de mentira,
está ahí como pegada
sobre un fondo irreal
como si de carton piedra
se tratara.
Hay una niña
que no sabe cómo recauchutar un tarro de mermelada
que no sabe cómo parir un hijo
con más de un feto muerto en las entrañas.
 |
| Shirley Temple, Salvador Dalí (1939) |
 |
| El sueño, Salvador Dalí (1931) |
Hay una niña que no sabe cómo
pero odia el wasap.
Amo tu cama, rica
 |
| Sara y Pedro, Amo tu cama rica (1991) |
" Ellos son su único problema, pero también su única solución..."
Cuéntame un cuento
 |
| Milo Manara |
Cuéntame otro cuento
uno que no me sepa.
Así, al oído, como si fueras mentira
y enciende todas las cerillas que quemen mi almohada.
Dejaré que te quedes a dormir una noche de estas,
y prometo quererte la próxima semana.
Hoy no, que estoy cansada.
Dame un beso y cállate anda.
Pero cuéntame otro cuento
antes de que te vayas,
antes de que me vaya,
antes de irnos.
antes de que me vaya,
antes de irnos.
Amelié y otros menesteres
Dado que el trabajo escasea
la pequeña Amelié ha decidido dedicarse a otros menesteres,
entre contrato y contrato.
Ahora le da por ir de compras sin comprar ropa,
solo poesía por un par de euros,
y pendientes sin pasar por caja.
Poesía en un sex shop
y pendientes de plata.
Ahora le da por querer querer.
Y en ocasiones, se le da de perlas.
la pequeña Amelié ha decidido dedicarse a otros menesteres,
entre contrato y contrato.
Ahora le da por ir de compras sin comprar ropa,
solo poesía por un par de euros,
y pendientes sin pasar por caja.
Poesía en un sex shop
y pendientes de plata.
Ahora le da por querer querer.
Y en ocasiones, se le da de perlas.
Librería Relieve
Miguel Hernández observa desde un estante
como vas acariciando las esquinas de las tapas duras
como apartas las motas de polvo de las blandas.
Te persigue con su mirada hambrienta
desde sus ojos redondos,
y tú le sientes a tu espalda.
Respiras profundamente en busca de su aliento
y Pepe, el librero, te ofrece uno de ellos.
Historias de Filadelfia
En ocasiones, resulta agotador ser Tracy Lord.
Aviso : Corazón pendiente de archivar.
Shiraz
 |
| Habitación de hotel, E. Hopper (1931) |
Ahí está.
Ignorando el tipo de uva que es,
y aún más, el vino que será.
No logra creer.
¿cómo una mermelada
puede convertirse en vino?
¿cómo ser sin dejar de estar?
Ahí está.
esperando un tren que la trepane.
Sin espejos por los que poder escapar.
Se llama Shiraz, dicen,
huele a nueces y a mora,
pero ella aún no lo sabe.
Proxima Estación
¿Cómo resolverán la luz, el viento
su paso por tan tensa encrucijada?
Lorenzo Oliván, La noche a tientas.
Otros ya lo hicieron en épocas pasadas,
no debe ser tan dificil ¿no?
Un pie delante, otro detrás,
brazos arriba y en marcha.
Aquí se hacen santos
Esta mañana,
cinco curiosos nos hemos asomado
con invitación de entrada
al Taller de Miguel Ángel Tapia,
un escultor de santos,
pero no uno cualquiera.
Miguel Ángel, ya su propio nombre lo indica,
es un escultor que hoy en día sigue trabajando
la madera de la misma forma que lo hicieron
los imagineros castellanos de los siglos XVI y XVII;
siguiendo el mismo proceso tradicional de elaboración
con madera de pino de Castilla,
policromía de temple al huevo,
pintura al óleo y estofados en pan de oro.
Pero además, va más allá, sin dejar de probar diferentes técnicas
que completen sus magníficas imágenes.
En poco más de dos horas ha ido respondiendo
a nuestras preguntas muy humanamente,
de la misma forma que talla sus obras,
y nos ha ido desvelando algunos secretillos (anecdóticos)
como por ejemplo, el uso de un billete de veinte euros
como nueva unidad de medida para hacerse una idea
de una talla que debía restaurar sin conocer las medidas
o como logra tallar las orejas y las bocas tan expresivas
de algunas imágenes, sin morir en el intento.
Ha sido un placer recordar y comprobar como algunos artesanos
siguen trabajando a la antigua usanza y adaptándose a los tiempos,
sin perder el encanto.
Estoy segura que si le pides una copia de la Giralda
lo mismo también te lo borda.
No dejen de visitar su web, porque merece la pena.
Gracias a Miguel Ángel, por invitarnos y
Gracias al colectivo del PROYECTO EXEA
que está trabajando por rescatar y difundir
el maravilloso mundo de la artesanía.
cinco curiosos nos hemos asomado
con invitación de entrada
al Taller de Miguel Ángel Tapia,
un escultor de santos,
pero no uno cualquiera.
Miguel Ángel, ya su propio nombre lo indica,
es un escultor que hoy en día sigue trabajando
la madera de la misma forma que lo hicieron
los imagineros castellanos de los siglos XVI y XVII;
siguiendo el mismo proceso tradicional de elaboración
con madera de pino de Castilla,
policromía de temple al huevo,
pintura al óleo y estofados en pan de oro.
Pero además, va más allá, sin dejar de probar diferentes técnicas
que completen sus magníficas imágenes.
 |
| Miguel Ángel mostrando pruebas pictóricas simulando al mármol. |
En poco más de dos horas ha ido respondiendo
a nuestras preguntas muy humanamente,
de la misma forma que talla sus obras,
y nos ha ido desvelando algunos secretillos (anecdóticos)
como por ejemplo, el uso de un billete de veinte euros
como nueva unidad de medida para hacerse una idea
de una talla que debía restaurar sin conocer las medidas
o como logra tallar las orejas y las bocas tan expresivas
de algunas imágenes, sin morir en el intento.
Ha sido un placer recordar y comprobar como algunos artesanos
siguen trabajando a la antigua usanza y adaptándose a los tiempos,
sin perder el encanto.
Estoy segura que si le pides una copia de la Giralda
lo mismo también te lo borda.
No dejen de visitar su web, porque merece la pena.
Gracias a Miguel Ángel, por invitarnos y
Gracias al colectivo del PROYECTO EXEA
que está trabajando por rescatar y difundir
el maravilloso mundo de la artesanía.
Técnicas de orientación
Compraré una brújula,
que la mía esta desimantada.
Ya me lo decía mi padre
comprar barato al final sale caro.
Compraré una brújula con otros puntos cardinales
otros que no sean norte, sur, este y oeste
otros con nombre de otras amistades.
Y en el caso de no encontrarla
siempre podré orientarme
por los nidos de algunos pájaros en los árboles.
Los campos magnéticos
Aprendiendo a interpretar
los campos magnéticos
cual paloma iniciada en su vuelo.
Para no perder el
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